La obra del profesor Miguel Vázquez Liñán trata de historiar el periodismo en su contexto cultural e ideológico, la evolución de los sistemas de comunicación en el imperio, la tecnología que los hizo posibles – como el telégrafo o el ferrocarril – así como la distribución y recepción de la prensa, sus puntos de venta o el precio de los periódicos.
El autor ha invertido gran parte de su vida en este libro. Para poder indagar en el tema se hacía cuestiones como, por ejemplo: ¿a través de qué canales llegaba la información? O ¿Qué papel jugó el periodismo en la construcción de los imaginarios e identidades políticas en el imperio ruso?
Es fundamental entender el contexto en el que la prensa se abrirá paso en el seno de un imperio jerarquizado en el que la mayor parte de su población vivía en condiciones de servidumbre, y en ese marco, la censura – siempre presente – acabará educando a los rusos a leer entre líneas.